SLO - Zdovc, listo para la misión

LJUBLJANA (FIBA Basketball World Cup) – La primera y la única vez que Jure Zdovc trabajó como seleccionador de Eslovenia fue en el EuroBasket 2009 en Polonia, y algunos pueden que recuerden aquello como una actuación de mago.

A pesar de las lesiones de jugadores clave en el torneo como Matjaz Smodis y Goran Dragic, el equipo de Zdovc creció partido a partido en fortaleza. Eslovenia enseñó garra, fuerza y ambición. En muchos sentidos, Eslovenia hizo la mejor historia de la competición, a pesar de quedarse a las puertas del podio.

Muchos de sus aficionados viajaron a Katowice para la ronda final y dieron al equipo una ventaja de campo que se notó en los cuartos de final venciendo por 67-65 a Croacia. El equipo perdió en la prórroga de aquel partido ante Serbia y se quedó a escasos segundos de mantener el bronce ante Grecia.

Eslovenia se quedó sin podio en Polonia pero se sintió orgulloso por esa esperanza de conseguir una medalla en un torneo grande, con el pensamiento de que un equipo entrenado por Zdovc podría ser invencible.

Sin embargo, Zdovc dejó el equipo para concentrarse en entrenar al Unión Olimpia. Han pasado años y no han venido medallas, por tanto Zdovc ha regresado como un héroe para entrenar al equipo de cara a la Copa del Mundo.

El sentimiento de decepción se apoderó de Eslovenia tras no conseguir una medalla en el EuroBasket 2013. Pero la esperanza ha vuelto de la mano de Zdovc. “Cuando me volvieron a decir que sería seleccionador nuevamente, hice una rueda de prensa y me emocioné”, comentó Zdovc a FIBA.com.

“No paraba de recordar lo bien que jugamos en 2009 y lo cerca que nos quedamos de las medallas. Estoy de vuelta, muy motivado. Esta es una nueva generación de jugadores”.

Dragic continúa en el equipo pero ahora se ha convertido en uno de los mejores del mundo, siendo el líder de los Phoenix Suns en la NBA.

Su hermano Zoran está brillando para Unicaja Málaga y tanto Jaka Blazic como Edo Muric son dos jóvenes talentos que serán clave en el equipo. Hay otros jugadores en el plantel que han impresionado también.

Zdovc entiende que tiene bastante presión por haber conseguido el cuarto puesto de Eslovenia en aquel Europeo de Polonia, y que será juzgado a partir de ese resultado.

“Sé que 2009 es una historia, y nunca he entrenado en una Copa del Mundo, sí que jugué uno. Veremos cómo va”.

Zdovc no sólo jugó en un campeonato Mundial FIBA, en Argentina en 1990, donde consiguió ganar con Yugoslavia teniendo un papel protagonista. La estrella de Maribor celebró la plata en los Juegos Olímpicos de 1988 y posteriormente el oro en el Europeo de 1989 antes de triunfar en Argentina.

Con tantos éxitos como jugador en aquellos tiempos, sin embargo, tuvo que enfrentarse bien pronto al momento más complicado de su vida. Al declararse las tensiones políticas en los Balcanes en 1991 y la inmediata declaración de independencia de Eslovenia de Yugoslavia, Zdovc se encontraba en el Europeo de Roma cuando recibió un fax.

Un oficial del gobierno esloveno le dijo que dejara de competir para Yugoslavia o sería considerado un traidor. Zdovc decidió no jugar la fase final con el equipo, aunque Yugoslavia sería capaz de vencer holgadamente a Francia e Italia para ganar el título.

Todavía se le ponen los pelos de punta al recordar aquella experiencia. “Fue algo malo para mí. Fueron momentos muy duros y no me gusta recordarlos. Pero por otra parte, nunca me arrepiento de lo que hice. Estuve muy orgulloso de dar aquel paso adelante”.

Zdocs asegura que sus compañeros y entrenadores en Yugoslavia entendieron lo que ocurrió. “Cada uno me apoyó. No había una sola persona que me dijera nada malo en aquel momento, ni el seleccionador Dusan Ivkovic".

Zdovc prefiere recordar los buenos momentos con el equipo yugoslavo. “El año 1990 fue muy importante. Estaba en el quinteto titular, siendo el base y jugaban grandes jugadores junto a mí como Vlade Divac, Drazen Petrovic, Zarko Paspalj y otros muchos”.

Para Zdovc resulta extraño recordar aquellos tiempos. Muchas cosas han ocurrido a su carrera y a su vida desde entonces. “Parece como si todo aquello que sucedió me hubiera pasado en otra vida. Ahora en Eslovenia, soy seleccionador.

“Fue maravilloso ver a algunos jugadores en el sorteo de la Copa del Mundo que me traían buenos recuerdos. Pero esto es historia y mi trabajo me encanta”.

Zdovc asegura que siempre hay presión para un entrenador. Él está listo. “Tu vida está enfrente tuya. El partido es mañana. Debes ganar. Qué importa lo que sucedió antes”, comenta.

¿Será Eslovenia capaz de jugar al mismo nivel que lo hizo en Polonia? “Creo que mi carácter, mi personalidad, ayudó a los jugadores a creer hasta el final. No fue sólo un trabajo, fue algo más. Miro desde 1991 a esta fecha y ningún entrenador ha llegado tan lejos como yo”.

Todo el mundo espera que Zdovc lleve a Eslovenia al podio por primera vez. El equipo jugará la primera fase de la Copa del Mundo en el grupo D contra Lituania, Angola, Korea, México y Australia.

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