Uno de los partidos más grandes de todo los tiempos encabeza el titular del día en Tokio

TOKYO (Japan) - Es un partido del que hablarán generaciones, y no solo los aficionados de Japón que celebraron que su equipo hiciera historia con una primera presencia en las semifinales del Torneo Olímpico de Baloncesto Femenino.

Su triunfo en cuartos de final por 86-85 sobre Bélgica fue un partido para todas las edades. Una epopeya, un clásico. Llegó solo 48 horas después de que se planteara una pregunta sobre si ya se había presentado en Tokio un hermoso plan de baloncesto para el juego femenino. La respuesta fue un rotundo sí, ya que Japón y Bélgica celebraron uno de los mejores partidos femeninos de todos los tiempos, o al menos, dentro de un contexto olímpico.

Hubo 13 cambios de ventaja y el marcador se empató siete veces. La mayoría de los neutrales probablemente estaban rezando por una prórroga, tal vez una doble, triple o cuádruple; nadie quería que la diversión terminara. Japón remontó en los últimos minutos, aprovechando una falta antideportiva y algunos triples increíbles para hacer el trabajo. Entonces Saki Hayashi le dio el golpe definitivo.

Esa daga se obtuvo como la asistencia número 14 de la mano de Rui Machida, ya que la base hizo una asombrosa cantidad de 51 asistencias en el torneo en solo cuatro partido. Yuki Miyazawa también estuvo excelente y lanzó siete tiros desde el centro, mientras que la 'Capitán Fantástica' Maki Takada también encendió las luces con 19 puntos.

Se dispararon emociones sobre la bocina cuando Bélgica falló un tiro para arrebatar la victoria. Puso al descubierto la cruda belleza y la crueldad del deporte en momentos tan cruciales. La alegría de toda una nación estalló para los anfitriones olímpicos. A pocos metros de distancia, las Belgas estaban desconsolados cuando su emocionante debut en los Juegos terminó con un golpe en el estómago.

"Les dije a los entrenadores de Bélgica y a algunos de los jugadores que me sentí mal y que me sentí mal por ellos, ya que son un equipo increíble y tan humilde", dijo después el entrenador de Japón, Tom Hovasse.

"Me sentí mal por mi celebración exuberante y no quise faltarle el respeto, pero literalmente perdí la cabeza durante 20 segundos. Fue increíble y no me había sentido así en mucho tiempo".

Tampoco todos los que aman el baloncesto femenino, Tom. O los muchos nuevos aficionados que probablemente atrajo este juego increíblemente magnético y cautivador. Continuó: "El partido tuvo tantos picos y valles. Estábamos colgados del acantilado por una uña en el último cuarto. Esta es la mayor victoria en la historia de Japón, ya que nunca habíamos estado en este nivel antes. El apoyo que vamos conseguir va a ser enorme ", insistió, quizás todavía sin llegar a un acuerdo con el hecho de que Japón está a una victoria de jugar por el título olímpico en casa.

En cuanto a Bélgica, las Cats deberían vivir para ver otros Juegos Olímpicos pronto, a saber, París 2024. También se espera que se clasifiquen y hagan un fuerte aumento en la Copa del Mundo de Baloncesto Femenino FIBA ​​2022 el próximo año, especialmente con Emma Meesseman a bordo. Firmó su debut en el torneo con otra línea espectacular con 25 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias. Kim Mestdagh no pudo convertir la potencial canasta ganadora del partido, pero debería ser recordada por los brillantes 24 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias que aportó en esta ronda eliminatoria.

Temprano en el día, Serbia demostró que no existe una escuela de baloncesto como la vieja escuela, ya que sus jugadoras experimentadas ayudaron a cambiar las cosas contra China para llevarse una reñida victoria por 77-70. Sonja Vasic demostró que podría haber suficiente en el tanque para repetir el podio de 2016 cuando se llevaron el bronce con 16 puntos y 10 rebotes hoy.

Con el partido de Vasic estable, Ana Dabovic proporcionó la chispa. Con la defensa en un extremo, lanzó un triple desde algún lugar cerca de Hawai para hacer creer a Serbia. Luego, el equipo continuó en esta línea. Los campeones de Europa habían perdido nueve puntos de cara a los últimos diez minutos. Al igual que con Japón, la entrenadora ganadora Marina Maljkovic se apresuró a presentar sus respetos a sus oponentes ya que su primera derrota los llevó a una salida.

"Quiero felicitar al gran equipo que es China", dijo Maljkovic. "Después de haber trabajado allí, sé que este es el mejor equipo de China en los últimos 15 años.

"Vivir en Shanghai durante dos años y ver todos los esfuerzos que están haciendo en torno al baloncesto femenino hace que esta victoria para nosotros sea enorme", agregó Maljkovic. "China es un equipo increíble, sabíamos que tendríamos que hacerlo con una actuación excepcional. Sabíamos que el juego sería muy difícil y muy exigente".

"Regresamos después de un tercer cuarto extremadamente difícil para ganar este partido, pero no quiero detenerme aquí. Queremos continuar y traer otra medalla a nuestro país".

Serbia jugará contra Estados Unidos en las semifinales mientras los vigentes campeones avanzaron con determinación sobre Australia por 79-55 gracias a la brillantez de Breanna Stewart. Anotó 23 puntos y apenas falló un tiro, mientras que las Opals fueron enviadas a casa y con muchas preguntas que responder después de un torneo mediocre en el mejor de los casos. Aún más urgente con la celebración de la Copa del Mundo de Baloncesto Femenino FIBA ​​dentro de poco más de un año.

Francia y España se enfrentaron en el último partido de una apasionante jornada de cuartos de final. Si alguien pensaba que la cuota de drama se había agotado, se equivocaba. Vecinos familiares que se conocen como una pareja casada debido a la gran cantidad de tiempo que han estado juntos en la cancha en los últimos años, fue Francia quien prevaleció por 67-64.

Marine Johannes marcó la diferencia, ya que acumuló 18 puntos, incluido un majestuoso tiro sobre el cristal durante el tiempo decisivo con 0.1 segundos restantes en el reloj de posesión. Derrotado tantas veces en partidos importantes por España en los últimos años, esta victoria acabó con algunos fantasmas. También le dio a Francia una oportunidad gloriosa de subir al podio y tal vez una repetición de su medalla de plata en Londres 2012.

Mientras tanto, la salida de España habrá provocado una celebración en Moscú, ya que su salida de la competición confirma la plaza de Rusia en los Torneos Clasificatorios de la Copa del Mundo de Baloncesto Femenino FIBA ​​2022.

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