Satoransky y la República Checa, encantados con el rol de tapados
CLUJ-NAPOCA (FIBA EuroBasket 2017) - Una de las historias de campanillas de 2015 fue el resurgimiento de la República Checa. Liderados por Tomas Satoransky, Jan Vesely y Blake Schilb, los checos destrozaro
CLUJ-NAPOCA (FIBA EuroBasket 2017) - Una de las historias de campanillas de 2015 fue el resurgimiento de la República Checa. Liderados por Tomas Satoransky, Jan Vesely y Blake Schilb, los checos destrozaron a Croacia en los octavos de final y finalizaron en séptima posición en el FIBA EuroBasket 2015.
De un tiempo a esta parte, Satoransky se hará cargo de la responsabilidad del equipo. Sus pases a Vesely y sus conexiones con Schilb tuvieron como resultados 7.3 asistencias por partido, únicamente superado por Mantas Kalnietis en ese aspecto. Sin Vesely bajo el aro, la República Checa no tiene más remedio que cambiar su estilo un poco.
Satoransky y Jan Vesely chocan el puño en 2015
"Ya he vivido veranos jugando sin él, habitualmente en los clasificatorios para el FIBA EuroBasket, así que no es extraño. Obviamente le echaré de menos en este FIBA EuroBasket y es complicado no tener al mejor jugador de nuestro equipo", dice Satoransky, quien acude a su tercer torneo de este tipo consecutivo.
"Vesely es una fuerza de la naturaleza, muy atlético, nos da una dimensión distinta para jugar. Podemos jugar rápidos con él porque consigue muchos rebotes y corre la cancha dándonos protección en toda la cancha. No es el único que echaremos de menos, también no estará Blake Shilb, quien nos da puntos también, así que vamos de tapados. Pero siendo así nadie esperará nada de nosotros y podremos dar un buen susto a algunos", añadió el base de 25 años.
Si. El base puede sacar pecho de ser el jugador que saca más oohs y ahhs en su posición en Europa, pese a haber sufrido para encontrar su hueco con los Washington Wizards. Le utilizaron como escolta, una vez que la posición de base estuvo casi todo el tiempo ocupada por la superestrella John Wall. Una vez que tiene el balón en sus manos, Satoransky demuestra que puede hacer cualquier cosa.
"Estoy intentando hacer todo lo necesario para el equipo. No sólo como base, a veces me la tengo que jugar y buscar el aro. Estoy encantado con jugar en cualquier de las posiciones que me pongan. Quiero darlo por el equipo para que mejore".
Rumanía será el primer test para probar el estilo de Satoransky. Aunque vuelva a jugar de base con sus 2.01m, trabajará duro junto al tirador Stefan Weissenbock para encontrarle abierto en la cancha.
"Por lo general, para los jugadores de la NBA la postemporada es muy larga en comparación con Europa, allí se acaba antes, y he tenido un tiempo para trabajar en mi tiro. Conocí a un entrenador de tiro en Alemania, traté de ir allí y centrarse en una cosa en particular, en tirar mejor, espero que me ayude, vi mejoras en las entrenamientos, ahora me toca mostrarla en los partidos, que es siempre más difícil ", explicó Satoransky.
Verá en la cancha muchas caras familiares en la cancha una vez que se mida con España, Hungría y Montenegro. Pero será más especial cuando se mida a su antiguo compañero en los Wizards, Bojan Bogdanovic.
"Hemos tenido una gran relación, él vino durante la temporada y hablábamos en español, porque solía jugar en Madrid, entrenábamos juntos, y me puse muy triste porque se marchó traspasado a los Indiana Pacers, pero así es como está en la NBA. Tienes que ir a donde quiera el equipo y no puedes hacer nada. Yo estoy deseando verlo, pasamos mucho tiempo de la cancha juntos, él es un gran tipo ".
Puede que alguno de ellos pueda alcanzar una medalla, aunque en las redes sociales Satoransky se ha mostrado muy abierto.
Would you like to taste? #PragueFoodFestival #chef pic.twitter.com/U82lOLYDHz
— Tomas Satoransky (@satoransky) May 28, 2017
"Bueno, para ser honesto, no cocino. No cocino en absoluto. No sé por qué siempre me ponen en ese lugar, tal vez es porque me gusta un montón de buena comida, buena cocina. Pero confía en mí, no quieres que cocine para ti", dice el jugador con una sonrisa.
Con su mote de Cocinero Satoransky por su facilidad para dar asistencias a sus compañeros, el jugador espera poder servir muy buenos platos para todo el mundo.
"Nah, mejor que me llaméis de otra manera. Asistente Satoransky es mejor".
FIBA